Conoce las diferencias entre contabilidad financiera y fiscal
Dentro del mundo de la administración de las empresas es importante distinguir dos conceptos que pueden parecer iguales porque comparten ciertas características, pero que en realidad son diferentes: una cosa es la contabilidad fiscal y la otra es la contabilidad financiera.
Diferencias principales
La primera diferencia entre la contabilidad fiscal y la financiera es a quién va destinada, digamos a su “audiencia”. La contabilidad financiera se destina a proporcionar información a accionistas, a acreedores bancarios, a proveedores, a organismos reguladores, a empleados, entre otros. Por su parte, la contabilidad fiscal tiene un destinatario: el gobierno, en el caso de México, el Sistema Administración Tributario o SAT.
A partir de esa primera diferencia, se construye la siguiente, pues cada una va a tener reglas en la elaboración y presentación de los datos. La contabilidad financiera se debe organizar con base en las normas para el caso que se emiten a nivel internacional o a nivel nacional —muchas veces coinciden ambas regulaciones—, para que la información sea entendible y digamos estándar y así sea entendida por todos. En otras palabras, gracias a esas normas los datos financieros son claros, confiables, comparables y destacables. En México, estos estándares los marca las Normas de Información Financiera (NIF).
Por su parte, la contabilidad fiscal al tener sólo un destinatario está regida por las leyes fiscales de cada país, y ahí sí puede haber muchas diferencias no sólo en los datos, los gravámenes hasta en la forma de presentación. En México, la contabilidad fiscal debe ser electrónica, pues los registros contables deben se elaborados con y en medios electrónicos para poder cumplimentar las disposiciones fiscales y regulatorias que fija la Secretarías de Hacienda y Crédito Público.
Se ve de diferente manera
Cabe destacar que entre la contabilidad fiscal y la financiera hay una diferencia importante que es que mientras la información fiscal, que responde a leyes fiscales, considera a los ingresos como “acumulables” para el cálculo de las obligaciones fiscales; pero también ciertos gastos son entran en la categoría de “deducibles” y también inciden (a la baja) en el cálculo del impuesto a pagar.
En cambio, para la contabilidad financiera, los ingresos son las entradas que la empresa recibe por la venta de su producto o el servicio que da, ya sea en efectivo o a crédito y ya. En el caso de los gastos incluyen todas las erogaciones que se hacen para generar el bien o servicio, sean sueldos, sean materiales, sean los recibos de agua, luz, los mismos impuestos y cualquier otra salida de recursos económicos.
En conclusión, la contabilidad financiera se usa básicamente para tener información que permita la toma de decisiones o la solicitud de créditos e inversiones, y la contabilidad fiscal se encamina al cumplimiento cabal de las obligaciones con el fisco, y de ahí sus diferencias.
Una vez que tienes claros ambos conceptos, recuerda que BFA te apoya tanto con la contabilidad financiera como la fiscal, contáctanos.
Fuentes:
https://odeair.com/2020/01/01/diferencias-entre-las-contabilidades-financiera-y-fiscal/